La Fórmula Paralela se desangra.

Nuestro campeonato, antaño convulso, se ha alineado en una trayectoria sobria y aburrida. Muchos culpan de esta circunstancia al nuevo patrón Eduard Ecclestone, patriarca de la familia Ecclestone, cuya rigidez y estricta soberanía podrían haber hecho perder el interés del campeonato. Sus detractores claman la vuelta de su hijo Eddy Ecclestone Jr. cuyas corredurías y cambios de parecer ensalzaban el día a día de la Fórmula Paralela.

Golden Bill, Killuminaty, Jon Clav, Luis Quesada, y, ahora, Aaronsuko han abandonado la Fórmula Paralela, y dicha circunstancia parece haber calado hondo en la persona del sumo pontífice que ha dado un golpe encima de la mesa para evitar que prosiga la fuga de pilotos hacia otros campeonatos. Parece estar pensando en abdicar en favor de su hijo y también indultar al piloto turco Golen Bill, que podría estar creando una nueva escudería. 

En este compás de espera, Eddy Ecclestone padre, ha decidido abrir el mercado de fichajes para restructurar los equipos y dar cabida a nuevos pilotos.

Además, debido a los recientes incidentes en los foros de la Fórmula Paralela, el patrón podría estar sopesando la introducción de una nueva normativa de sanción del tipo económico que afectaría en la participación de cada escudería a la hora de pagar la ceremonia de clausura. Por lo que hemos podido saber en El Automodelista, cada escudería contará con un presupuesto virtual del que se irán descontando dichas sanciones y que servirá para establecer la participación económica que tendrá cada escudería en la cena final.